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La Visión 2020‑2023
Prefacio del presidente
La Visión 2020-2023 es nuestro compromiso con las federaciones miembro de la FIFA y con todos los amantes del fútbol
Ahora que la Copa Mundial de la FIFA™ y la Copa Mundial Femenina de la FIFA™ —las dos grandes competiciones futbolísticas— avanzan hacia nuevos horizontes (Catar 2022, Australia y Nueva Zelanda 2023), el balompié de élite debe ser un reflejo de la población mundial que vive y respira fútbol.
En 2020, y gracias a la lúcida gestión financiera de los últimos años, la FIFA pudo apoyar a las federaciones miembro de una forma práctica y colaborativa, con empatía y liderazgo, durante la pandemia de COVID-19.
Tras habernos asegurado de que ningún miembro de la familia del fútbol afronta los problemas en solitario, es el momento de seguir impulsando el deporte moderno, accesible, inclusivo y global que concebimos.
En este informe se presentan los logros conseguidos y las bases que se han sentado en el primer año de la Visión. Próximamente, el fortalecimiento de la gobernanza y la reforma del sistema de traspasos generarán más dinero que potenciará el desarrollo sostenible del fútbol, y, al mismo tiempo, se revisarán los procesos internos de la FIFA para optimizar su eficiencia. No sólo mejoraremos el escenario en que se jugará el mejor fútbol del planeta, sino que con ello aspiramos también a mejorar la situación del deporte y de la sociedad a través del balompié.
En los diálogos con los grupos de interés del fútbol, hemos hablado, pero, ante todo, hemos escuchado. De este modo, la FIFA ha creado un foro de debate sobre las cuestiones que nos afectan a todos: los calendarios internacionales, las competiciones, la creación de iniciativas, el uso de la tecnología y la reforma de la gobernanza. No es necesario ocultar las diferencias de opinión, al contrario. Todos nos beneficiamos de la creatividad y las nuevas ideas surgidas del debate y esto genera nuevas formas de gestionar el fútbol.
Queremos mantener esta voluntad de colaboración en el segundo año de la Visión para conseguir que el fútbol sea realmente global. Al fin y al cabo, el deporte más importante del mundo debe reflejar la realidad mundial.
Saludos deportivos,
Gianni Infantino
26 de febrero de 2021
Perspectivas
En 2020, publiqué mi «Visión 2020-2023», que destacaba la necesidad de conseguir que el fútbol sea realmente global.
Doce meses más tarde, podemos echar la vista atrás para analizar el progreso que hemos alcanzado y detectar los retos que nos quedan por delante.
El mundo tuvo que pararse en 2020, mientras anteponíamos la salud a todo lo demás. Así, nos vimos ante un doble objetivo para servir al fútbol: seguir trabajando por construir la nueva FIFA, y estar ahí para ayudar a nuestro deporte en el momento de mayor necesidad.
La vocación de la FIFA es regir el fútbol, y la estructura que lo sustenta sufrió un cambio vital en 2020. El organismo está evolucionando rápidamente para servir de forma más eficaz a nuestro deporte, haciéndolo realmente más popular, desarrollándolo y democratizándolo, en beneficio del mundo entero.
La nueva FIFA está modernizando el fútbol para que sea global, accesible e inclusivo en todos los aspectos. No solo en un par de continentes, sino en todos.
Al igual que los jugadores no celebran la victoria en el descanso, nosotros no bajamos los brazos ni damos por terminado nuestro trabajo. Esta nueva FIFA seguirá desarrollando el fútbol en todas partes, de manera que haya al menos 50 selecciones nacionales y 50 clubes, de todos los continentes, que realmente puedan competir en la élite.
Es mucho lo que tiene que cambiar para que la visión se haga realidad, pero quisiera presentar algunos objetivos concretos para la FIFA en los próximos doce meses.
Proteger el deporte
La Cámara de Compensación de la FIFA comenzará a funcionar, un paso esencial en la reforma del sistema de transferencias para proteger la integridad del fútbol que hará que el dinero se quede dentro del sistema, para su propio beneficio.
Además, el tercer (y último) paquete de reformas dará los últimos retoques al modelo operativo de los traspasos.
Fijar unos cimientos de acero
La administración seguirá agilizando y digitalizando sus procesos, y aplicará la rendición de cuentas financiera en favor de una buena gobernanza.
La FIFA también aplicará un nuevo modelo operativo: creará entidades locales para organizar torneos en las ciudades anfitrionas, mientras se establecerán procesos de presentación de candidaturas transparentes para las próximas grandes competiciones de la FIFA.
Mostrar a los mejores del mundo
La cooperación es clave si hablamos del calendario internacional de partidos. Junto con los distintos interlocutores, debemos estar dispuestos a repensar cómo lograr que el fútbol sea realmente global, y abordar el desequilibrio competitivo, cada vez mayor.
Mejorar la situación del deporte y la sociedad
La FIFA invierte mucho en fútbol femenino, y debemos ofrecer estructuras competitivas sólidas para seguir apoyando su profesionalización. Se han puesto sobre la mesa numerosas ideas innovadoras.
Por último, la protección del niño debe ser una prioridad. Seguiré apostando por crear una entidad deportiva internacional independiente y segura el año próximo.
Mientras nos acercamos a 2022, hacia la Copa Mundial de la FIFA™ en Catar, y después a 2023, con la mayor Copa Mundial Femenina de la FIFA™ de la historia, en Australia y Nueva Zelanda, o dejaremos de trabajar por alcanzar estos objetivos.
Llevaremos un fútbol más accesible e inclusivo a todos los rincones del planeta.
Y conseguiremos que el fútbol sea verdaderamente global.