Visión 2020‑2023

La normativa rectora del fútbol tiene por objeto protegerlo en su integridad. Con el fin de conseguir este propósito, es fundamental actualizar de manera constante el marco regulador para garantizar la transparencia a escala global y para tener en consideración en todo momento los intereses de todos los actores del fútbol del mundo entero.

Invertir en el fútbol es la máxima prioridad de la FIFA; es el objetivo último de una serie de programas dedicados a apoyar a las federaciones miembro y a otros grupos de interés. Sobre la base sólida de la Copa Mundial de la FIFA™, deben hallarse nuevas fuentes de ingresos sostenibles para velar por el continuo flujo de dichas inversiones.

La FIFA tiene el deber de servir al movimiento futbolístico y de satisfacer las necesidades de sus miembros. Para ello, debe adoptar un enfoque de servicio y no dejar de aumentar sus capacidades organizativas para ser cada vez más eficiente y eficaz.

Las competiciones de la FIFA son la mejor plataforma para mostrar el fútbol del máximo nivel de todo el mundo y hacer soñar a miles de millones de aficionados. El éxito sin parangón de la Copa Mundial de la FIFA™, la Copa Mundial Femenina de la FIFA™ y la nueva competición mundial de fútbol de clubes de la FIFA es esencial para hacer que este círculo virtuoso continúe.

El fútbol es un fenómeno global, y lo es cada vez más. En este sentido, la FIFA vela por que sus competiciones sean eventos realmente globales en cuanto a integración, ubicación, público y, sobre todo, impacto.

Cuando se habla del nivel futbolístico, las diferencias entre unas regiones y otras no dejan de agrandarse. La FIFA debe adoptar medidas específicas para reducir esas diferencias, con el objetivo a largo plazo de que, como mínimo, 50 selecciones nacionales y 50 clubes de los cinco continentes alcancen el máximo nivel competitivo.

Uno de los objetivos estatutarios de la FIFA es mejorar el fútbol constantemente y promocionarlo en todo el mundo. Con este fin, se deben mejorar las estructuras de desarrollo del fútbol para lograr una repercusión positiva en todas las disciplinas —fútbol masculino y femenino, fútbol juvenil, futsal y fútbol playa— y en todo el mundo.

En todo el mundo, muchas niñas y mujeres juegan al fútbol con gran pasión. El apoyo al fútbol femenino, así como la participación de las mujeres en todos los niveles de la gobernanza del balompié reviste la máxima prioridad para el fútbol en el planeta. La FIFA continuará respaldando este proceso a través del fortalecimiento de las estructuras de participación de las mujeres en el fútbol y su administración.

En los últimos años, la presencia de la tecnología en el mundo del fútbol ha aumentado considerablemente, cambiando la percepción del balompié y ofreciendo un amplio abanico de posibilidades. La FIFA tiene el deber de garantizar que se aprovecha este potencial para mejorar la calidad del deporte rey, tanto dentro como fuera del campo.

Sus valores fundamentales son los que convierten al fútbol en algo más que un deporte. La FIFA tiene la obligación de proteger y potenciar estos valores, garantizando que se promuevan en todo el planeta y aprovechando al máximo su potencial para ejercer una influencia positiva en el mundo del fútbol.

La influencia del fútbol en la sociedad queda patente cada día en todo el mundo. Se trata de un deporte que une a las personas, sirve como fuente de inspiración a muchas generaciones y fomenta el espíritu de equipo. La FIFA está decidida a aprovechar este poder para promover cambios sociales positivos y atajar problemas mundiales como el cambio climático, contribuyendo así a cumplir los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU.